Saltar al contenido
Portada » Villa Nueva presentó su nuevo Código de Edificación: “Un antes y un después para la ciudad”

Villa Nueva presentó su nuevo Código de Edificación: “Un antes y un después para la ciudad”

Este jueves 10 de julio, en el Salón de Usos Múltiples del Parque Hipólito Yrigoyen, el intendente Ignacio Tagni encabezó la presentación oficial del nuevo Código de Edificación de Villa Nueva. Se trata de una normativa clave para el ordenamiento y la planificación urbana de la ciudad.

El evento reunió a una amplia representación de instituciones y profesionales vinculados al desarrollo urbano: arquitectos, ingenieros, técnicos, desarrolladores, comisiones vecinales, el Centro Comercial e Industrial, la Cooperativa de Agua y Cloacas, entre otros actores que participaron activamente del proceso de elaboración.

“Hoy venimos a presentar un código que ordena y planifica la ciudad. Un código que va a generar previsibilidad y un marco normativo claro para todos los villanovenses y para quienes quieran invertir”, expresó Tagni al abrir el acto. Y agregó: “Esto viene a cambiar la historia de Villa Nueva. Iniciamos una nueva etapa de crecimiento, planificación y ordenamiento. Un proyecto de ciudad posible”.

Durante la jornada, los profesionales Javier Yañez, Pablo Sthelli y Alejandro Prato explicaron los tres documentos que integran la normativa: el Código de Fraccionamiento de Suelo, el Código de Edificación y el Código Urbano-Rural. La actualización establece parámetros claros para el desarrollo urbano y rural, priorizando la sostenibilidad, la identidad local y la calidad de vida de los habitantes.

Uno de los ejes centrales del nuevo marco legal es la protección del patrimonio histórico, natural, cultural y arquitectónico, con especial mención al río Ctalamochita y cañada de los Castañones, considerados elementos clave en la preservación del entorno y la memoria urbana.

La iniciativa también pone en foco las desigualdades que generó el proceso de extensión urbana acelerada registrado desde 2001, que incorporó más de 250 hectáreas de nuevo suelo urbano destinadas casi exclusivamente a sectores de alto poder adquisitivo, sin una oferta suficiente de suelo con servicios para los estratos medio-bajos y bajos.