Una nueva destrucción masiva de caños de escape no homologados se realizó este viernes en Villa María. En total se eliminaron 161 dispositivos que generaban contaminación sonora excesiva.
Los caños destruidos habían sido retirados de motos y autos durante controles de tránsito recientes. Todos incumplían las normativas sobre emisión de ruidos.
Ya van más de 450 caños destruidos en el año
Esta es la tercera operación de destrucción en 2025. Las anteriores se realizaron en octubre y marzo pasados.
El número total ya superó los 450 caños eliminados en pocos meses. Una cifra récord comparada con años anteriores.
Antes se destruían entre 100 y 120 caños por año. El ritmo actual marca un cambio histórico en los controles.
Ruidos que superan los límites permitidos
Los dispositivos eliminados generaban ruidos por sobre lo tolerado. Se miden con decibelímetro para verificar las infracciones.
«Muchas veces la convivencia se ve alterada por estos instrumentos no reglamentarios», explicaron desde el área de seguridad. Los vecinos necesitan vivir en paz y sin ruidos molestos.
La contaminación sonora afecta directamente la calidad de vida de los habitantes. Interfiere con el descanso y la tranquilidad familiar.
Ordenanzas claras contra los caños irregulares
Las Ordenanzas 7.376 y 8.156 prohíben estos dispositivos en la ciudad. Establecen normas específicas sobre emisión sonora vehicular.
Los vehículos deben circular con caños originales o similares homologados. No se permiten modificaciones que aumenten el ruido.
Los infractores pueden solicitar una prueba de emisión sonora. Si los niveles están dentro de los límites, quedan eximidos de sanciones.
Proceso desde la infracción hasta la destrucción
Cuando detectan un caño irregular, retienen el vehículo en el acto. El propietario recibe una infracción inmediata.
El Juzgado de Faltas luego aplica la multa correspondiente. Para recuperar el vehículo, deben instalar caños homologados.
Los caños retirados se acumulan hasta realizar las destrucciones masivas. El proceso está previsto por ordenanza como obligatorio.
Sanciones que van más allá de las multas
Los talleres mecánicos que instalen dispositivos irregulares también reciben sanciones. La multa mínima es de 500 Unidades Municipales.
Una medida adicional excluye a los infractores de beneficios sociales. Quedan sin acceso a asistencia alimentaria, subsidios y medicamentos gratuitos.
Control permanente en las calles
Los operativos de control continúan durante todo el año. Se realizan en diferentes puntos de la ciudad.
«Medimos con decibelímetro, siempre respetando las garantías constitucionales», aclararon las autoridades. También se respetan los derechos de los vecinos a vivir en paz.